Según un informe elaborado por COAG, se calcula que este año caerá un 26% el precio del cereal, además de que la producción va a ser muy desigual dependiendo de las diferen­tes zonas del Estado español, en algunas de las cuales la sequía va a tener una incidencia importante.

No es el caso de Araba y Nafarroa, donde las perspectivas apuntan a que se va a recoger por encima de la media de las últimas campañas, a tenor del estado favorable en el que se encuentran los cultivos cerealis­tas en estas dos provincias, al igual que sucede en Andalucía, las dos Castillas y Extremadura. Entre las comunidades que se van a ver más afectadas por la sequía se sitúan Cataluña, Aragón, La Rioja, Murcia y Baleares.

Lo que sí va a ser un factor común a todas ellas es el descenso de los pre­cios y el notable aumento de los insu­mos. En lo que respecta a los prime­ros, según los precios de coyuntura semanal que publica el MAPA, com­parando las primeras semanas de 2023 y 2024, el trigo ha pasado de 306 euros/tonelada a 223 y la cebada de 287 a 211. En cuanto a los costes, se sitúan en una franja de entre 280-320 euros/tonelada en cereales de seca­no, siendo los fertilizantes quienes se llevan la mayor parte, suponiendo un 30% del total.